Se trata de una novela entrañable y a la vez triste, que muestra la relación de una niña con su abuelo (la infancia y la ancianidad), y cómo estas dos etapas se encuentran muy próximas a veces por la fantasía y los recuerdos. A Belinda le encanta descubrir todo aquello que le enseña su abuelo; pero le preocupa cuando le escucha decir que quiere enseñar a volar a un caballo.
La niña descubre la magia de los amaneceres frente al mar, los paseos a caballo y los alimentos recién recolectados de la huerta; pero, sobre todo descubre la magia que se halla en aquel hombre imaginativo y extravagante y la sabiduría de los abuelos.
La alegría de la infancia y, por último, la muerte del abuelo se dan cita en esta novela tan intimista. Ladrón de Caballos es una tierna historia sobre otro modo de entender la vida, una invitación a pasar por ella de manera sencilla y tranquila, un homenaje a lo esencial: los vínculos familiares y el amor.
La alegría de la infancia y, por último, la muerte del abuelo se dan cita en esta novela tan intimista. Ladrón de Caballos es una tierna historia sobre otro modo de entender la vida, una invitación a pasar por ella de manera sencilla y tranquila, un homenaje a lo esencial: los vínculos familiares y el amor.